sábado, 9 de enero de 2010

MODELOS DE ANALISIS SEMIOTICOS (UMBERTO ECO Y ROLAND BARTHES)

Universidad Católica “Cecilio Acosta”
Facultad de Ciencias de la Comunicación Social
Programa: Comunicación Social (Desarrollo Social)
Sistema: Distancia
Cátedra: Semiótica




MODELOS DE ANALISIS SEMIOTICOS






















Alumno:
Roman Teodoro Colina Moreno
C.I.: 17.827.673

Profesor: Radames Larrazabal.
Maracaibo, Enero 2010

DESCRIBA LOS MODELOS DE ANÁLISIS SEMIÓTICOS DE: UMBERTO ECO (DISTINGUE 2 REGISTRO: VISUAL Y VERBAL)

Una serie de investigaciones en el campo semiótico a mediados de la década de los 60 le permite a Eco determinar a aquello que denomina los umbrales la semiótica. El primero, umbral inferior, refiere a todas aquellos áreas del conocimiento que decididamente no se constituyen a partir de la noción de sentido. Y menciona: los estudios neuro-fisiológicos sobre fenómenos sensoriales, las investigaciones cibernéticas aplicadas a los organismos vivientes, las investigaciones genéticas -en las que también se utilizan los términos “código” y “mensaje”-. Y la razón es simple: se encuentran en el universo del pasaje de señales. En cuanto al segundo, umbral superior, está representado por los estudios que refieren a todos los procesos culturales como procesos de comunicación (“aquellos en los que entran en juego agentes humanos que se ponen en contacto sirviéndose de convenciones sociales”).
Ahora bien, Eco se manifiesta realmente preocupado por determinar el umbral superior, por “el linde entre aquellos fenómenos culturales que sin lugar a dudas son signos (por ejemplo las palabras) y aquellos fenómenos culturales que parecen tener otras funciones no comunicativas (por ejemplo, un automóvil, sirve para transportar y no para comunicar). Pues entiende que si no se resuelve este problema “ni siquiera podemos aceptar la definición de la semiótica como disciplina que estudia todos los fenómenos culturales como procesos de comunicación” (Eco, [1968]1989:26 y ss.).
Y su interés en resolver las cuestiones de frontera, esconde una disputa anterior: la protagonizada por Barthes (y su semiología de la connotación) contra Luis Prieto y Georges Mounin, entre otros (partidarios de una semiología de la comunicación). De esta manera, Eco ingresa al conflicto decidido a manifestar su apoyo a la posición barthesiana, aunque para ello deba realizar un gran esfuerzo silogístico, de pruebas y contrapruebas. Sólo reconociendo esta diferencia epistémica -y en el fondo política-, se pueden comprender las famosas dos hipótesis sobre las que se asienta la siguiente conclusión: “la semiótica estudia todos los procesos culturales como procesos de comunicación; tiende a demostrar que bajo los procesos culturales hay unos sistemas; la dialéctica entre sistema y proceso nos lleva a afirmar la dialéctica entre código y mensaje” (Eco [1968]1989:33).
Las hipótesis propuestas son las siguientes:
1) Toda cultura se ha de estudiar como un fenómeno de comunicación (o en su aspecto más radical “la cultura ‘es’ comunicación”). Desde esta posición, Eco sostiene: a) que la semiótica es una teoría general de la cultura, y en último análisis, de la antropología cultural; b) reducir toda la cultura a comunicación no significa reducir toda la vida material a ‘espíritu’ o una serie de acontecimientos mentales puros; c) imaginar la cultura como una subespecie de la comunicación no significa que sea solamente comunicación, sino que se puede comprender mejor si se examina desde el punto de vista de la comunicación, y d) los objetos, los comportamientos, las relaciones de producción y los valores funcionan desde el punto de vista social, precisamente porque obedecen a ciertas leyes semióticas.


2) Todos los aspectos de la cultura pueden ser estudiados como contenidos de la comunicación (o cualquier aspecto de la cultura puede convertirse en una unidad de sentido). Esta idea se refiere a i) cualquier aspecto de la cultura se convierte en una unidad semántica; y ii) si esto es así, los sistemas de significados se constituyen en estructuras (campos o ejes semánticos) que obedecen a las mismas leyes de las formas significantes. En palabras de Eco: ‘automóvil’ no es sólo una unidad semántica a partir del momento en que se pone en relación con la entidad significante /automóvil/. Es unidad semántica a partir del momento en que se dispone de un eje de oposiciones o de relaciones con otras unidades semánticas como ‘carro’, ‘bicicleta’ o incluso ‘pie’. Este sería el nivel semántico desde donde puede ser analizado el objeto automóvil. Pero además, existe un nivel simbólico, cuando se usa como objeto: en este caso el auto como objeto que transporta gente o cosas se convierte en el significante de una unidad semántica que no es “automovil”, sino por ejemplo “velocidad”, “comodidad” o “riqueza”.


Eco concluye que ambas hipótesis -respaldadas por sus respectivas premisas- se sostienen mutuamente en forma dialéctica: “En la cultura cada entidad puede convertirse en fenómeno semiótico. Las leyes de la comunicación son las leyes de la cultura. La cultura puede ser enteramente estudiada bajo un punto de vista semiótico. La semiótica es una disciplina que puede y debe ocuparse de toda la cultura” (Eco [1968]1989:33).


ROLAND BARTHES (DISTINGUE 3 NIVELES DE INTERPRETACIÓN: VERBAL (FUNCIÓNES DE ANCLAJE Y RELEVO). DENOTADO Y CONNOTADO)

Este semiólogo de origen Francés en 1970, realiza un análisis extenso de una historia breve, el Sarrasine de Honoré de Balzac, donde pretende identificar otras fuentes de significado y de relevancia. Con su lectura tan abierta, establece cinco grandes códigos que determinan los tipos de significado, y que pueden encontrarse en un texto a través de múltiples lexias. Estos grandes códigos lo llevaron a definir que las historias tienen la capacidad de ofrecer una pluralidad de significados, si bien ésta se halla limitada por otros elementos formales, como es la secuencia lineal de la escritura: al ser una línea temporal definitiva, que debe ser seguida por el lector, restringe su libertad analítica e interpretativa. De este proyecto concluye que un texto ideal debiera ser reversible; es decir, abierto a una gran variedad de interpretaciones diferentes. Un texto solo puede ser reversible al evadir los artefactos restrictivos que Sarrasine tiene, por ejemplo las líneas temporales restrictivas, así como definiciones exactas de eventos. Él lo describe como la diferencia entre un texto «escribible», en la cual el lector reinterpreta libremente y adquiere un papel activo en el proceso creativo; y un texto «legible», en los cuales se restringen estas posibilidades y son textos simplemente leídos. Este proyecto le ayudó a identificar lo que él buscaba en la literatura, la apertura para múltiples interpretaciones. Su noción de textos escribibles es similar al concepto del hipertexto, el cuál será desarrollado posteriormente por otros autores.
Barthes distingue tres tipos de mensajes en los códigos visuales:1- Mensaje Lingüístico: Presente en todas las imágenes, corresponde al lenguaje articulado escrito, cuyos significados están formados por los objetos de la escena y los significantes por estos mismos objetos reales fotografiados. Puede formar parte de la misma imagen (en forma de etiqueta o rótulos, por ejemplo en otras puede estar al margen de ella. Las funciones que desempeña son:
a- De Anclaje: El mensaje lingüístico hace que el observador elija una de las múltiples significaciones que puede ofrecer la imagen. La importancia del anclaje es su función ideológica. La operación de esta función se asemeja a la de un ancla que fija la movilidad de un barco, es decir, aquí el texto determina la descodificación de la imagen. El anclaje es un control, detenta una responsabilidad frente a la potencia proyectiva de las figuras-sobre el uso del mensaje: con relación a la libertad de los significados de la imagen, el texto tiene un valor represivo.
b- De Relevo: El mensaje lingüístico relevo el lector al lector de la necesidad de elegir uno de los significados. A través del texto reinterpretamos lo icónico. La operación de esta función se basa en que se el sentido generado por lo icónico quien envuelve lo verbal.
2- Mensaje icónico literal: Forma parte de un primer nivel del lenguaje que puede llamarse denotado en la medida en que la relación significante/significado que en él se establece es casi automática y natural, es la composición plástica, la descripción verbal o enunciación de los elementos que conforman todo el objeto de análisis. Es la abstracción de todos y cada uno de los componentes, sin ampliarlos con significaciones, simbolismos o lo que el mensaje pudiera significar para un espectador en un momento determinado.
3- Mensaje icónico simbólico: Es fruto de acoplamiento de un segundo lenguaje (el de lo codificado y cultural), el cual se trata de la connotación, está formado por agrupaciones de determinados elementos de la figura que producen significación al activar o actualizar ciertos saberes culturales. Contiene todos los significados posibles de contenido, los cuales se pueden enunciar con expresiones como: “esto me da la impresión de tal cosa” o “esto parece decir tal” esto corrobora que es la interpretación de los elementos presentes de la imagen. Esta clase de mensaje proyectan un simbolismo, una ideología, los valores que la publicidad maneja para introducirse en la preferencia del consumidor. “un mensaje, a nivel connotado ayuda a interpretar la escena, es decir precisar su significación simbólica, que para su compresión, se suele exigir un saber cultural”.


BIBLIOGRAFIA
http://www.nombrefalso.com.ar/index.php?pag=32
http://es.wikipedia.org/wiki/Roland_Barthes
www.archivo-semiotica.com.ar/mapa.html
http://guidoroman.blogspot.com/2009/06/modelos-de-analisis-semioticos-umberto.html